Trastorno Obsesivo-compulsivo (TOC)

El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) es un trastorno de ansiedad que se caracteriza por la aparición de ideas, pensamientos, imágenes o impulsos recurrentes e intrusivos.

Las obsesiones son ideas, pensamientos, impulsos o imágenes que vienen a la mente de forma involuntaria, la persona no se los puede quitar de la cabeza, y que provocan elevados niveles de ansiedad y que causan un intenso sufrimiento emocional. Normalmente, en algún momento, la persona reconoce que esas ideas son absurdas o irracionales pero no puede evitarlas.

Las obsesiones pueden manifestarse de muchas maneras, aunque las temáticas más conocidas son las de limpieza o comprobación, hay muchos tipos de obsesiones diferentes, que van desde obsesionarse con acto de tragar la propia saliva, hasta el miedo a hacerle daño a un ser querido…

  • Miedos o temores obsesivos como el miedo a contaminarse o contraer una enfermedad (tocando algo, dándole la mano a alguien…)
  • Impulsos obsesivos de carácter agresivo (por ejemplo herir a un hijo…)
  • Obsesiones de contenido sexual (por ejemplo la presencia de una imagen mental pornográfica recurrente)
  • Dudas obsesivas como preguntarse a sí mismo si ha realizado un acto en concreto (miedo a dejar las puertas o el gas abierto o miedo a haber hecho algo sin darse cuenta…)

La persona intenta rechazar estos pensamientos obsesivos, ya sea mentalmente, suprimiéndolos o ignorándolos, o mediante la realización de  conductas compulsivas o rituales repetitivos, esto es lo que llamamos las compulsiones. Las compulsiones son actos motores o mentales que la persona lleva a cabo para intentar neutralizar la ansiedad que le produce el pensamiento obsesivo. Las compulsiones pueden ser:

  • Conductas compulsivas (como por ejemplo lavarse las manos, ordenar o hacer comprobaciones)
  • O actos mentales como contar, analizar una conversación o repasar mentalmente un acontecimiento.

La característica común de todas aquellas personas que sufren este trastorno obsesivo compulsivo son los elevados niveles de ansiedad. Además en muchas ocasiones la persona suele vivirlo con mucha angustia y trata de esconder su problema a los demás. ya que en muchos casos los pacientes creen que los demás pensarán que su problema es ridículo, o que están locos o también piensan que no les van a comprender, lo que les lleva en muchas ocasiones a realizar las compulsiones a escondidas de los demás. Es también frecuente el sentimiento de culpa por tener este tipo de pensamientos.

El TOC produce un deterioro en la calidad de vida de la persona, que está en constante lucha consigo misma, y suele interferir en su vida personal y en las relaciones con los demás

Lo cierto es que el TOC puede tener diferentes niveles de gravedad, pero en su versión más extrema puede llegar a ser gravemente incapacitante. Por ello es muy importante intervenir sobre él cuanto antes.